RENOIR ó el disfrute de los cinco sentidos...

Museo Thyssen. Madrid.

Del 18 de Octubre 2016 al 22 de Enero 2017.

La exposición busca mostrar al público las sensaciones táctiles que tienen sus lienzos, retratos, paisajes, escenas familiares y domésticas..

Huye del reduccionismo que acota el impresionismo a la pura visualidad y plasma una intimidad evocadora...

78 lienzos incluyen préstamos de Chicago, National Gallery Londres, Museo Pushkin de Rusia, dividido en varias secciones...pintor de sensaciones, ternura

No es observador distanciado y crítico; es el más empático de los impresionistas, a diferencia de Degas, Manet, es menos teórico, busca disfrutar de la vida con los 5 sentidos...

Renoir...de origen humilde, pintaba para vivir... Cuando la pintura de la luz se toca y se siente...

Muestra un mundo amable, digno de ser amado. Sus obras son una invitación sensorial, un estímulo para el alma...

Una cercanía tangible que hace cómplice al espectador; en sus retratos centra la atención en el rostro consiguiendo un grado aún mayor de intimidad y misterio...

Mucho tuvo que ver su formación en el Colegio de los Hermanos Lasalle en Francia; Sin ser católico, recogió la mirada de Dios sobre el mundo...

En un salto mágico, desde la palpación de la tela, Renoir, proyecta el tacto hasta de los cuerpos...Su ojo abrazaba al cuerpo femenino con entusiasmo...

La cabellera de la mujer, objeto femenino de deseo, fetiche pictórico, metáfora de lo deseado.Lo femenino, lo masculino, asignación de roles que Renoir instaura en su pintura...

Manos y cuerpos que dialogan, miradas que abren un abismo, miradas confidentes, amigas, muestra la plenitud de las relaciones humanas, madre, hijo, hermanos...

Escenas de luces y sombras, identidades cómplices que buscan intimidad...una poética ambigüedad en El Paseo, sin caer en la banalidad de la anécdota.

Su gusto por la vida, la curiosidad de sus gestos, los bailes populares a orillas del Sena...muestra su gran "empatía" con el espectador..a diferencia de Degas con una mirada perturbadora.

Una de las imágenes más icónicas de su madurez, Aline Renoir dando el pecho a su hijo Pierre."Cada mujer que amamanta a un niño es una Virgen de Rafael"

Pierre Auguste Renoir (1841-1919)

Nada como la obra de Renoir para imaginarnos que acariciamos un melocotón, de piel mas suave que la fruta.

Especialmente por su técnica, a base de superposiciones de capas finísimas y por su paleta de colores vivos. Renoir produce una sensación de delicadeza, una sensación ligera y agradable...El pintor descubre su visión de la vida...Su intimidad trasciende la sinceridad...

Encontramos en sus obras un tejido de relaciones humanas, con su entorno, familia, amigos.

Esta muestra también plasma la relación del artista con su marchante Durand-Ruel(1831-1922)

La derecha conservadora de las últimas décadas de la Tercera República, podía ver en Renoir un defensor de la tradición nacional, esencialmente francesa, no contaminada por influencias extranjeras, y una cómoda distancia de la modernización e industrialización.

En el intento de capturar los efectos d la luz diurna en la naturaleza, una luz natural que penetra en todo y todo lo modifica.

Desarrolló junto a Monet, aunque centrándose sobre todo en la figura humana, una manera sinóptica y un cromatismo liberado dl claroscuro tradicional.  El modelado mediante luces y sombras, además del nuevo cánon de la vida moderna, nuevos escenarios que los impresionistas introdujeron..una  mirada inocente, como percibiría el mundo una persona ciega si de repente recuperara la vista.

Una visión del mundo de Renoir alegre, afectuosa, optimista...

El mismo Guillaume Apollinaire(1880-1918) poeta vanguardista, crítico de arte, se mostraba emocionado con la producción de Renoir de bañistas, desnudos y figuras mitológicas "Renoir es cada día mas grande, sus últimos cuadros son siempre los más bellos y también los más juveniles" Enriquecidos sus valores cromáticos había alcanzado el control de sus capacidades

Su emoción ante el cuerpo femenino estaba ligada tal vez a la idea de  la maternidad. Era una emoción muy pura.

"¡Esto es escultura!"....

En éste su último periodo clásico arcádico, celebra el desnudo femenino, tan admirado por Apollinaire, un recuerdo a Tiziano, Rubens, Ingres y sus obras destacan por su concentración y plasticidad. Su energía y vitalidad, en unos momentos en los que su salud ya era frágil, desmienten una visión errónea de la visión acaramelada o pasteles rosados, sino todo lo contrario, buscaba la solidez de la forma. Ante sus desnudos fue Aristide Maillol quien dijo "Esto es escultura!"