Ya está abierta al público, dentro del corazón castizo madrileño, La Capilla del Obispo perteneciente al Conjunto Monumental de San Andrés.
Hace 40 años le diagnosticaron ruina y se cerró por peligro de derrumbe,ha estado en obras los últimos 5 años. Ahora recién restaurado este edificio del SXVI, es declarado Bien de Interés Cultural, la máxima protección que contempla la legislación.
El emplazamiento elegido para edificar esta capilla fue el cementerio de la parroquia de San Andrés, solar colindante a la casa de los Vargas y en 1518, una bula del Papa León X concedía al solicitante licencia para" fundar una capilla en Madrid y la prerrogativa de colocar en ella el cuerpo del que luego sería San Isidro". Sin embargo, el licenciado Vargas murió en 1524 sin haber concluido las obras continuando su labor su segundo hijo y sucesor Gutierre de Carvajal y Vargas, quien la concluyó en 1535 dotándola de los medios económicos. Gutierre había sido nombrado Obispo de Plasencia a los 18 años como prueba de agradecimiento del Emperador Carlos al apoyo recibido.
Con la excusa de ocupar más suelo y sitio para el coro, ocuparon parte de la capilla de San Andrés, se originaron ciertas desavenencias y litigios entre los capellanes y párrocos de San Andrés y la Capilla por la propiedad de las reliquias del santo. Tras 15 años de litigio pone fin el Cardenal Tavera determinando la separación entre ambas regresando las reliquias a la parroquia y quedando la capilla exclusivamente como panteón familiar de los propietarios. Su promotor, Francisco de Vargas, perteneciente a una familia prestigiosa estudió en Salamanca y pronto sobresalió en sus habilidades y experto manejo de negocios lo que le llevó a ocupar el cargo de Corregidor de los Reyes Católicos.
Las tareas de rehabilitación han sacado a la luz los cimientos de la parroquia de San Andrés y su cementerio, que los visitantes podrán contemplar desde un ventanal, en el suelo de la capilla, con restos de Gutierre de Carvajal y Vargas, Obispo de Plasencia, que fue quien continuó las obras de esta capilla, fundada por D Francisco de Vargas y Medina, privado de los Reyes Católicos
A pesar de la estructura gótica de su arquitectura se trata de una obra del Renacimiento el Retablo Mayor, obra de Francisco Giralte (1500-1576), discípulo de Berruguete, es plateresco, tallado en madera de nogal con las técnicas del dorado, estofado y policromado al temple. La estructura se apoya sobre un zócalo de pizarra y es de tres calles y cinco entrecalles. Horizontalmente se arganiza en sotobanco, tres cuerpos y ático con sobreático. Las calles van separadas con columnas jónicas y grutescos .
El programa iconográfico plasma escenas de la infancia y pasión de Cristo.Y el cuerpo superior coronado con un grupo escultórico sobre la Crucifixión. En las entrecalles 22 figuras que representan a los Apóstoles y a los Santos Padres.
Los sepulcros de alabastro pertenecen al Obispo de Plasencia y sus padres Francisco de Vargas e Inés de Carvajal, situados a ambos lados del presbiterio.
La idea original fue que este lugar fuera capilla funeraria para albergar los restos de San Isidro. Fue enterrado y desenterrado en varias ocasiones, fue Alfonso VII quien erigió la primera capilla para San Isidro en Evangelio de la Primitiva Parroquia de San Andrés.
El maravilloso cenotafio cincelado en mármol por Giralte, discípulo de Juan de Juni, donde una figura orante sobre un rico reclinatorio entre niños, y matronas, mira al altar.
LAS HERMANITAS DEL CORDERO, CUSTODIAS DE ESTA CAPILLA NOS INVITAN TODOS LOS DIAS ( DE LUNES A VIERNES) A REZAR Y CANTAR CON VOCES CELESTIALES LOS OFICIOS DEL MEDIODÍA A LAS 13 HORAS.
ALTAMENTE RECOMENDABLE!!